INSEGURIDAD CIUDADANA CAMPEA EN TALARA

TALARA,PIURA

Son muchas las demostraciones que indican que la provincia esta desprotegida. La presencia de microcomercializadores de drogas, prostitución callejera, violencia, pandillas juveniles y delincuencia común se manifiestan ya en el Cercado y zona urbana marginal.

Las crónicas rojas se han convertido en pan de todos los días, y el temor se ha apoderado de una población que se siente impotente por la inacción de la seguridad ciudadana que no hace frente a estos vicios de la sociedad.

Al ser consultado el Consejero Delegado por Talara en el Gobierno Regional, Prof. Pedro Estrada Severino, sostuvo que el actual gobierno municipal hace todo lo posible para resarcir los defectos heredados de su antecesor; sin embargo, admitió que en su ciudad se percibe que la inseguridad se ha apoderado de las calles. “Lamentablemente, en Talara estamos viviendo un rebrote de la violencia urbana y la delincuencia en todas sus modalidades”, sostuvo.

Agregó que el problema social pasa por la escasez de efectivos policiales y logística y por un cuerpo de serenazgo con muchas limitaciones y que no cuenta con los elementos requeridos para disuadir a la delincuencia

Al ser preguntado qué es lo que le queda a la población, si los “planes” del Comité Provincial de Seguridad Ciudadana todavía no están dando los resultados esperados; Estrada Severino sugirió que ante la falta de policías la población tiene que organizarse, protegerse y defenderse. “Si siempre vamos a tener miedo, entonces no se podrá enfrentar el problema”, enfatizó.

En otro momento, manifestó que el Estado peruano es muy tolerante y esto se corrobora porque muchas veces, no se sanciona la delincuencia común y la ocasionada por los desbordes sociales.

Finalmente, propuso que la ciudadanía tiene que trabajar en forma conjunta, autoridades y población para elaborar una defensa efectiva ante una agresión y que la coordinación y la organización de las juntas vecinales de seguridad ciudadana es un gran alternativa para garantizar la integridad de las personas.

“No se puede esperar que la violencia, delincuencia y la inseguridad crezcan cada día sin que hagamos algo para enfrentarla”, terminó Estrada Severino.